Una feria que te va a enloquecer

La feria de San Telmo, es una ceremonia que se da en los días domingo. Desde 1970, un evento se repite en el escenario de la Plaza Dorrego: Baúles, cajas, hierros, tablas, canastos, se ven tanto de día, como de noche. Desde temprano, se construye una feria de cosas viejas y antiguedades de San Pedro Telmo. Se forman sobre el adoquinado de la plaza y repite un ritual que se ha convertido en el corazón de un barrio que los domingos late de una manera especial.





 Lo dificil se hace a la hora de querer formar parte de los 270 puestos de la feria. Es casi exclusivo y solo es una posibilidad que se les da a quienes cumplen con una seria de requisitos: se entra por sorteo a medida que van quedando puestos libres, y se debe disponer de mercadería anterior a los años 70'. El titular debe estar siempre y solo puede tener a un ayudante durante solo dos horas. También, cada tres meses se realiza un sorteo para cambio del lugar que ocupa cada puesto en la plaza. Esta organización la lleva adelante el Museo de la Ciudad creador y continuador de la Feria.

Los precios de los shopping son inaccesibles. Yo estaba resignada a solo mirar vidrieras. Por eso ahora me convertí en una adicta a las ferias. Acá encuentro de todo, a buenos precios, y siembre salco con alguna bolsa. 

Cuenta Mariana Estévez, 24 años, una de las tantas personas que cada fin de semana elige esta nueva forma de comprar, la cual tiene su lugar en Buenos Aires: Ferias de diseño.

 Las visitas a esta gran feria, recibe cerca de las 20 mil personas, cada domingo, entre ellas un alto porcentaje lo ocupan turistas de todo el mundo: los franceses, elegantes por naturaleza, prefieren la bijou o los vidrios, mientras que lo brasileros, se inclinan por los metales y objetos de colores. Los italianos, van por las joyas antiguas, y los españoles elijen abanicos y pinturas.